Escribe Martín Fu
A Oscar Aguad le dicen “el milico”. Es el actual ministro de Defensa, cargo que también ocupaba cuando desapareció el ARA San Juan. En su momento se habría referido a la “impericia” o “falla humana”, tratando de esquivar sus responsabilidades por mandar a navegar a lo que quedaba de una flota vetusta y sin el mantenimiento adecuado.
Ahora Aguad es nuevamente noticia, sumándose al coro de gran parte del gobierno de Macri que pretenden no sólo reivindicar a los genocidas, darles prisión domiciliaria o buscar la “reconciliación”, al usar el desfile por los festejos del 9 de Julio para reivindicar al carapintada Aldo Rico.
Para el “milico” Aguad, “lo de Aldo Rico con los carapintadas es historia vieja, fue algo chiquito, no creo que haya puesto en jaque a la democracia” (Infobae, 10 julio), intentando quitarle importancia y minimizando el alzamiento que comandó en Semana Santa de 1987 contra el gobierno de Alfonsín, que provocó una enorme y masiva respuesta popular con cientos de miles en las calles y rodeando Campo de Mayo, repudiando la intentona golpista y exigiendo la rendición de Rico. Mientras Aguad y el gobierno intenten lavarle la cara a los milicos, seguiremos denunciando cualquier intento de perdón, reconciliación y de falsear la historia.