Este miércoles 2 de julio, asumieron en nombre de Izquierda Socialista en el Frente de Izquierda Unidad, la diputada nacional Mercedes de Mendieta y el diputado Juan Carlos Giordano.
Escribe Daniela Vergara – Dirigenta de Izquierda Socialista/ FIT Unidad
El 29 de Junio se votó para concejales en todas las ciudades de Santa Fe. La abstención fue del 48% en toda la provincia, y del 52% en Rosario. Superior a lo sucedido en las PASO de Abril. Muestra la bronca y el desinterés por el sistema político, en el medio de una situación social y económica cada vez más desesperante.
En ese contexto, en Rosario, Juan Monteverde –dirigente de Ciudad Futura, ahora integrada en el peronismo de Traferri, Rodenas y otros “rancios” perotistas- se alzó con el primer lugar con el 30% de los votos. Sumo también el apoyo de la burocracia sindical peronista, incluyendo el Frente de Trabajadores de la Educación (Lista Celeste), que con un fraude escandaloso se quedó con la delegación Rosario de AMSAFE el 18 de Junio. El peronismo también ganó en Villa Gobernador Galvez, San Lorenzo, Rafaela, Reconquista, Santo Tomé y Funes.
La campaña electoral de Monteverde consistió en decir que va a ser candidato a intendente en 2027. Es parte de una centroizquierda cada vez menos confrontativa con los negocios de los grandes empresarios de la provincia y la ciudad. Su política es básicamente sostener propuestas supuestamente “imaginativas” que aparenten solucionar algo, pero sin molestar al poder económico. Y por lo tanto sin obtener los recursos para las verdaderas soluciones. Pero es evidente que capitalizó parte de la bronca contra Milei y Pullaro, que es grande y sigue creciendo.
El peronismo tuvo otros dos candidatos que quedaron lejos de entrar al Concejo deliberante. Se puede decir que el peronismo santafesino finalmente encontró una figura “votable” fuera de su partido.
La Libertad Avanza -con un candidato mediático y todo el apoyo nacional- llego al 28%, y promedió el 20% en toda la provincia. Solo se impuso en una ciudad importante (Villa Constitución). Un performance floja, aunque le puede servir para seguir seduciendo a algunos dirigentes del PRO que quieren volverse “morados”, en las elecciones de Octubre, así como acercarse a Granata, que en estas elecciones tuvo candidatos con un pobre desempeño.
Pullaro y su alianza Unidos (UCR-PS-PRO) llego a un magro tercer lugar en Rosario con un 25%. Incluso perdió la mayoría del Concejo. Flojo resultado, si consideramos todo el poder del gobierno provincial y municipal, y realizando una campaña multimillonaria. Se manifiesta nuevamente la bronca con su gobierno, pese a que está “blindado” por la prensa local y nacional, a fuerza de masivos fondos en pauta oficial.
El Frente de Izquierda obtuvo el 3%, con más 11500 votos en Rosario y 1000 en Villa Gobernador Galvez. Logramos consolidar un espacio de la vanguardia sindical y política, que no se deja engañar por el supuesto voto útil al peronismo. De esta forma seguiremos luchando por construir una alternativa de las y los trabajadores, apoyando las luchas de la clase trabajadora, las mujeres y las sexualidades disidentes, contra los gobiernos la ultraderecha y los ajustes de los gobiernos de Milei y Pullaro. Y especialmente apoyando al pueblo palestino contra el genocidio del sionismo.
Escribe Juan Carlos Giordano, diputado nacional electo Izquierda Socialista/FIT Unidad
En una nota de balance sobre las elecciones legislativas del FIT Unidad en CABA aparecida en Izquierda Diario (22/5/25) con la firma de Selma Román, el PTS se pregunta: ¿cuáles eran las mejores opciones para un mejor resultado? ¿Desde la izquierda podríamos haber hecho otra cosa? Buenos interrogantes si se tratara de debatir lealmente cómo el FITU puede mejorar en una campaña electoral. Pero nada de eso embarga al PTS, salvo el de usarlo para justificar proyecciones electorales completamente equivocadas y echarle la culpa al resto de los partidos del Frente de Izquierda.
El PTS arranca diciendo en su nota “el FITU fue una de las cinco listas que logró ingresar a la Legislatura en un escenario adverso, donde competían 17 opciones, no había medios de comunicación gratuitos para difundir ideas, mientras que tuvieron campañas multimillonarias y horas y horas de aire y streaming quienes ni siquiera pasaron el piso del 3%”. Esta sola descripción está revelando que el FITU, en una situación adversa, logró ser quinta fuerza y entrar a la >Legislatura. Es decir, hizo una buena elección. Pero el PTS saca otra conclusión: que se podrían haber sacado hasta tres diputaciones y haber logrado que miles de los que no fueron a votar lo hicieran por el Frente de Izquierda si Myriam Bregman encabezaba la lista. Algo completamente fuera de lugar, ya que en nuestra opinión eso no estaba planteado, salvo en las consideraciones electoralistas equivocadas del PTS quien ahora lo intenta justificar de la peor manera con este balance.
Vamos por parte. El PTS olvida algo fundamental cuando describe el “escenario adverso para la izquierda”. No menciona que estamos bajo un gobierno nacional ultraderechista desde hace un año y medio, y que esa expresión, lamentablemente, fue la que ganó en CABA con el batacazo de Adorni. Entre las listas de ultraderecha y de derecha se llevaron el 55% de los votos y un 30% las listas del peronismo. El 3,16% que logró el FITU demuestra que no hay un giro electoral hacia la izquierda. Eso es lo que se dio y se viene dando en otras provincias. A esta realidad el PTS la ignora. Y en una actitud facilista sostiene que si Bregman encabezaba la lista era “muy probable no solamente la posibilidad de sostener las dos bancas que poníamos en juego, sino hasta obtener tres bancas, superando incluso a la lista de Rodríguez Larreta” (nota citada de Izquierda Diario, 22/5/25).
Sobre esto digamos que al PTS, más allá del importante reconocimiento que tiene Myriam Bregman como figura, el cual desde Izquierda Socialista valoramos, no les correspondía encabezar por los resultados de las PASO de 2023, sino a PO con Vanina Biasi. Con la particularidad que como Bregman va a ser candidata a diputada nacional en octubre en virtud de los acuerdos establecidos en el FIT Unidad, en caso de salir no podría asumir como legisladora, siendo de esa manera una candidatura testimonial, práctica propia de los partidos patronales.
Pero más allá de estas consideraciones, ¿De dónde sacó el PTS que en una elección donde se fortaleció políticamente la ultraderecha Bregman podía torcer la abstención y encima lograr tres bancas, algo que nunca logró el FIT Unidad en CABA? Crear la ilusión de que el FITU puede sobrepasar las tendencias objetivas de la realidad (lo cual no depende de nosotros), es completamente equivocado, ya que intenta reemplazar la situación concreta por sus deseos. Esto confunde y desubica a la militancia del Frente de Izquierda para dar la dura pelea política electoral.
Por ejemplo, el PTS hizo campaña diciendo que su candidato Luca Bonfante, que iba segundo, podía salir, llamando a lograr los 120 mil votos para ello. Como no se dio, ahora hace un balance para justificar su equivocada predicción electoral. Y de paso le echa la culpa “a la baja militancia involucrada en la elección por parte del PO, MST e IS” (idem). Dicen el PTS y Bonfante que sólo ellos se pusieron “la campaña al hombro contra todos los partidos del régimen”. Esto es falso, divisionista y desprecia a las organizaciones hermanas del FITU. No lo podrían sostener en un debate de cara a toda la militancia del FIT Unidad, que con un tremendo esfuerzo peleó el voto en los lugares de trabajo, estudio, barrios y plazas, repartió miles de volantes y logró cientos de fiscales enfrentando a los partidos patronales. Esta acusación tiene el objetivo de ocultar, a su vez, que el PTS se negó a una campaña unitaria, como debería haber sido, lo que sí debilitó la campaña electoral.
Por ejemplo, el PTS impidió que el Frente de Izquierda hiciera su acto tradicional del Primero de Mayo en Plaza de Mayo porque ya había definido semanas antes que haría su propio acto en el micro estadio cerrado de Ferro. Actitud que impidió que el FITU llamara a fortalecer unitariamente la pelea por el voto. Y cuando en la nota hablan de que hicieron un “masivo festival” en Filosofía y Letras, hay que aclarar que fue solo del PTS porque se negaron a hacerlo en común, entre tantas otras actividades de campaña.
El PTS finaliza diciendo: “Promovamos un debate en el FITU para que podamos dar la mejor batalla política posible”. Desde ya que es importante el debate para sacar las mejores conclusiones y cambiar lo que sea necesario, no bajo las premisas que escribió el PTS.
Primero, sería bueno abrir el debate sobre la política que tiene que postular el FITU. No coincidimos con el perfil político que le imprimió a su campaña el PTS diciendo “no es momento de tibios”, en referencia al peronismo de Santoro, ya que Santoro no es ningún “tibio” que se queda a mitad de camino, sino que es parte del peronismo que le aporta votos a Milei en el Congreso para que saque las leyes, Santoro votó a favor del acuerdo con el FMI en 2022 y dijo que no era “anti-Milei”. En cambio, desde Izquierda Socialista dijimos que contra la ultraderecha y la derecha, Santoro no era ninguna alternativa, sino la salida de fondo que postula el FITU con el no pago de la deuda externa. Segundo, sostenemos que las campañas del FITU deben ser unitarias entre todos los partidos del Frente de Izquierda, uniendo a nuestra militancia en actividades comunes, sin divisionismo ni autoproclamación. Porque el objetivo final pasa por fortalecer al FIT Unidad como la única alternativa política de la clase trabajadora, las mujeres y disidencias y la juventud para pelear por un gobierno de las y los trabajadores.
No nos vamos a cansar de repetir, el Frente de Izquierda es superior a los partidos que lo componen y nadie sería lo que es individualmente por fuera del FIT Unidad. Convocamos a hacer este debate a la militancia del FIT Unidad y a reflexionar a la dirección del PTS sobre sus equivocadas conclusiones.
El viernes 30 de mayo en la puerta del Concejo Deliberante de Rosario, el Frente de Izquierda Unidad lanzó la campaña para las elecciones generales del 29 de junio, en la que se elegirán concejales en todas las ciudades de la provincia. La lista encabezada por Carla Deiana (PO) en Rosario va por la disputa de una banca para el FITU, que rotaríamos con nuestra compañera dirigenta docente de Izquierda Socialista Daniela Vergara, y el resto de las fuerzas integrantes del frente. También estuvo presente Juan Jose Gauna, dirigente de Izquierda Socialista, que encabeza la lista de concejales de la importante ciudad obrera de Villa Gobernador Gálvez.
*Foto de portada: De izquierda a derecha. Irene Gamboa (PTS), Carla Deiana (PO), Jimena Sosa (MST) y Daniela Vergara (Izquierda Socialista)
Corresponsal
*Foto de portada: Mercedes Trimarchi (Izquierda Socialista) y Vanina Biasi (PO)
Escribe Guido Poletti
En el contexto general del resultado electoral, el Frente de Izquierda hizo una buena elección. A pesar de la abismal diferencia presupuestal destinada a la campaña y del escaso espacio que le otorgaron los medios de comunicación, finalizó en quinto lugar, inmediatamente detrás de Manuel Adorni (LLA), Leandro Santoro (Es Ahora Buenos Aires), Silvia Lospennato (PRO) y Horacio Rodríguez Larreta (Volvamos Buenos Aires). Superó así a fuerzas que durante toda la campaña fueron presentadas como “más competitivas”, como la del ultraderechista Ramiro Marra (Ucedé). El FIT Unidad también se impuso sobre expresiones políticas patronales de peso, como la UCR de Lucille Levy; la lista impulsada por Guillermo Moreno, con Alejandro Kim; el libertario Yamil Santoro; o el ex secretario general de la Presidencia de Cristina Fernández, Juan Manuel Abal Medina, entre otros.
En una campaña marcada por el descontento, que se expresó principalmente a través de la abstención, se destaca el 3,16 % obtenido por el FIT Unidad, una de las cinco fuerzas que logró representación parlamentaria. Renovó una banca que será ejercida de manera rotativa, como ya es tradición, por Vanina Biasi (PO), Celeste Fierro (MST), Andrea D’Atri (PTS) y nuestra compañera de Izquierda Socialista, Mercedes Trimarchi, dirigenta de la agrupación Isadora - Mujeres en Lucha.
El FIT Unidad llevó adelante una campaña a pulmón, recorriendo barrios, colegios y facultades, mientras acompañaba todas las luchas que continuaron pese al contexto electoral.
Durante toda la campaña, las y los candidatos del Frente de Izquierda fueron blanco de un ataque sistemático por parte de varios periodistas mediáticos, que los acusaron de “antisemitas” por denunciar el genocidio llevado adelante por el Estado sionista de Israel y por apoyar la causa del pueblo palestino.
A pesar de eso, se sostuvo una campaña ejemplar y principista: no dejó de denunciar lo que otros callaban y se hizo presente en cada una de las luchas contra el plan motosierra del presidente Javier Milei. La banca conquistada estará, como siempre, al servicio de todas esas peleas. Más que nunca, es necesario fortalecer al Frente de Izquierda Unidad frente a los desafíos que se vienen. Por eso, te invitamos a sumarte a Izquierda Socialista, a reunirte y organizarte con nosotros.