Escribe José Castillo, dirigente de Izquierda Socialista/FIT Unidad
El gobierno ultraderechista de Milei sufrió un auténtico desbarranque en las elecciones de la provincia de Buenos Aires. Perdieron por paliza, en el total de votos, pero también en el “mapa provincial”: fueron derrotados en 6 de las 8 secciones electorales. En el corazón del conurbano bonaerense, tanto en los partidos de la sección Tercera como de la Primera, el voto contra el gobierno fue demoledor. Cuanto más popular era el barrio, menos votos sacaba La Libertad Avanza. También perdieron en La Plata. E incluso en la Segunda, donde el gobierno estaba seguro de ganar, en base a derrotas contundentes en los localidades donde residen los trabajadores ajustados de la industria metalúrgica. Fueron derrotados hasta en zonas rurales donde daban por descontado su triunfo.
La lectura de la derrota es simple: el pueblo trabajador repudió la motosierra, el super-ajuste, el someter al hambre y la marginación social a millones. También los ataques a la educación, a las personas con discapacidades, los insultos, la agenda anti-derechos contra las mujeres y disidencias y, sobre todo a partir de las últimas semanas, la corrupción por las coimas de Karina Milei y los intentos de censura a los periodistas.
Gran elección del Frente de Izquierda
El FIT Unidad hizo una excelente elección, con el 4,37% a nivel provincial y una votación muy superior en el conurbano bonaerense, en especial en las barriadas populares. En la Tercera Sección Electoral sacó 5,71%, obteniendo dos bancas, que serán ocupadas por Nicolás del Caño (PTS) y nuestra compañera de Izquierda Socialista, la delegada ferroviaria Mónica Schlotthauer. Desde el bunker del Frente de Izquierda en Avellaneda, la reciente diputada electa afirmó: “estamos compartiendo con millones de trabajadoras y trabajadores en la provincia, pero también en todo el país la alegría por la derrota del gobierno”. “Asumimos estas bancas para que, junto con las nacionales, sigan siendo trincheras de lucha, como las que construimos en cada fábrica, en cada universidad, en cada lugar donde hay una pelea”. “Vamos a continuar poniendo nuestras bancas al servicio de las luchas del pueblo trabajador contra la motosierra de Javier Milei, el FMI y los gobernadores".
Mónica Schlotthauer también dedicó el triunfo “a esos 300 luchadores de todo el mundo que están asumiendo el desafío de llegar a Gaza, contra el genocidio de Netanyahu”, entre ellos el diputado nacional de Izquierda Socialista/FIT Unidad, Juan Carlos Giordano, y Ezequiel Peressini, dirigente de la UIT-CI.
Los resultados del Frente de Izquierda Unidad implican una gran responsabilidad, la de seguir peleando contra la motosierra y este gobierno ultraderechista. El presidente Milei, en su discurso, a pesar de que tuvo que reconocer que “hemos tenido una clara derrota”, insistió en que “el rumbo no lo vamos a modificar, sino que además lo vamos a acelerar y profundizar más”.
Habrá que seguir peleando, en las bancas del Congreso y también en las calles. Ese es el compromiso del FIT Unidad, al que hay que seguir fortaleciéndolo, en primer lugar votándolo en las elecciones nacionales de octubre.










