Los trabajadores de General Motors recibieron el apoyo de la CGT San Lorenzo, que está discutiendo la posibilidad de lanzar un paro regional contra la ola de despidos que viven las industrias de la zona. Y distintos sindicatos que integran el Movimiento Sindical Rosarino, como Sadop, Empleados de Comercio, Luz y Fuerza, Bancarios y otros, se solidarizaron con los obreros despedidos aunque todavía no se han convocado medidas concretas de solidaridad.
Por otra parte, los medios de comunicación reducen la cobertura del conflicto bajo la presión de la empresa, que es anunciante en la mayoría de los canales, radios y el diario La Capital. Esto llevó a los trabajadores a intentar ganar segundos de TV en el móvil de canal 3, que transmite todas las mañanas desde la peatonal de la ciudad.
El jueves 16, se realizó nuevamente una multitudinaria asamblea de trabajadores efectivos y despedidos en la planta, que ratificó la exigencia de que se anule el acta General Motors-Smata. Aumenta la bronca dentro de la fábrica. Incluso los directivos del Smata hablan de que podría haber reincorporaciones. A su vez, la patronal ofrece semana a semana montos mayores de indemnización para desinflar el conflicto. El Comité de lucha se ha fortalecido y se resolvió continuar las acciones, como una nueva movilización al Smata para exigir que cambien su actitud pro patronal y respeten la voluntad de los trabajadores.