El debate sobre qué política tener hacia la Federación Gráfica Bonaerense se vino desarrollando entre las organizaciones combativas en los cuatro plenarios que convocaron los trabajadores de AGR. Desde Izquierda Socialista siempre consideramos muy importante no desconocer a la Federación Gráfica Bonaerense. Es preciso denunciarlos por no haber garantizado a fondo el paro del 19 de enero, que se le arrancó después de 30 años, no garantizar que los trabajos de AGR no se hagan en otros talleres, debilitando la lucha y no impulsar un plan de lucha de todo el gremio, con nuevos paros. Pero a la vez que los denunciamos, también tenemos que seguir reclamándole a la Federación que no aíslen el conflicto, por eso fue un avance haber conquistado el plenario de delegados del 16 de febrero y la marcha unitaria del 22 a Plaza de Mayo, como explicamos en el 4º plenario. Reclamos y exigencias concretas que debemos mantener hacia el gremio para obligarlo a no borrarse del conflicto. Acordamos con la comisión interna de AGR en exigirle a la CGT el adelanto de su paro general en apoyo a esta lucha y a otras, como la de los docentes.

Lamentablemente la movilización a Plaza de Mayo se dividió por responsabilidad de la conducción de la Federación que quiso evitar el necesario protagonismo de los trabajadores de AGR en la cabecera, e intentó coparla junto a organizaciones kirchneristas como Quebracho y la Tupac Amaru, que no vienen apoyando la lucha. Es preciso denunciar a la burocracia sindical y al kirchnerismo por su nefasto rol en este conflicto. Y empujar desde el sindicalismo combativo en la marcha convocada el 7 de Marzo para exigir paro y plan de lucha de la CGT para terminar con los despidos y las suspensiones y contra el techo salarial del 18%. En esas tareas estamos empeñados.

Solidaridad internacional

En el 4º plenario obrero realizado el 20 en la puerta de la fábrica ocupada se hicieron presentes varios dirigentes de la UIT-CI para hacer llegar la solidaridad internacional. Antonio Espinoza de la Corriente Clasista, Unitaria, Revolucionaria y Autonoma (CCURA) y del Partido Socialismo y Libertad (PSL) de Venezuela, llevó el apoyo de los dirigentes sindicales Orlando Chirino y José Bodas, a la vez que denunció el brutal ajuste económico que está llevando adelante Nicolás Maduro en Venezuela.

Y Enrique Gómez de México llevó la solidaridad de la cooperativa de los trabajadores del neumático Tradoc (que realizaron una huelga histórica con ocupación de fábrica de más de tres años) y de la Nueva Central de Trabajadores que votó el apoyo a AGR en su 2º Congreso con más de 300 delegados.