Escribe Eugenio Spagnoli, médico psiquiatra infanto-juvenil.

El 4 de mayo desde las 11, trabajadores de la salud de La Matanza nos concentramos en la plaza de San Justo. Una manifestación en el marco del paro de 48 horas convocado por la APS (Asociación de Profesionales de la Salud) de La Matanza y la Fesprosa.
Se sumaron a la iniciativa Mónica Schlottauer (diputada electa y dirigenta ferroviaria), Graciela Calderón (diputada provincial -mc-) y Olga Ortigoza (concejala electa La Matanza) de Izquierda Socialista. También lo hicieron dirigentes del PO (Gabriel Solano y Eduardo Bellioni), del PTS (Natalia Hernández) y compañeros de la Agrupación Salud en Marcha, junto a una delegación de militantes de nuestro partido.

Las y los trabajadores del Hospital del Niño de San Justo venimos reclamando por mejoras salariales, que lleven a nuestros ingresos por encima de la línea de la pobreza para cubrir la canasta básica familiar, y terminar con la precarización laboral. Reclamamos, además, por condiciones laborales dignas, como la adecuación de las políticas sanitarias a la plena implementación de la ley nacional de salud mental. Y, responsabilizamos al gobierno peronista del intendente Fernando Espinoza por el brutal vaciamiento y desmantelamiento que viene sufriendo el sector de salud pública municipal. Pone en jaque el acceso de la población matancera a un derecho humano tan básico y primordial como lo representa el acceso a la salud.

Contra esta política de ajuste, desde Izquierda Socialista, exigimos más plata para educación, salud, y vivienda, en base a dejar de pagar la deuda usurera y fraudulenta con el FMI.