En estas elecciones se pusieron en juego dos modelos de centro. La Cámpora se proponía convertir al centro en un aliado del gobierno y la dirección, jugándose a desmovilizar a los estudiantes y a impedir cualquier tipo de lucha para mejorar nuestras condiciones educativas. Por otro lado, desde la Lista 31 de Enero, propusimos un modelo de centro completamente independiente, no solo de la dirección, sino del gobierno nacional, provincial y municipal, que se juegue a dar la pelea por una educación pública, gratuita y de calidad para que los estudiantes podamos aprender en condiciones dignas.
La lista 31 de Enero (día en el cuál fue secuestrado Luciano Arruga) fue encabezada en la presidencia por nuestro compañero Pablo Odero, lista que impulsará un centro de estudiantes combativo y democrático, donde todo se decida en asambleas y donde todo aquel que quiera participar pueda hacerlo, para plantear sin ninguna traba las problemáticas que tenemos los estudiantes.