Print this page

Paritaria: salarios, Covid, infraestructura, flexibilización laboral / Preparar a la docencia para la lucha

Publicado en El Socialista N° 524
Tags

Graciela Calderón

Escribe Graciela Calderón Secretaria adjunta Suteba Matanza/Diputada Pcia. Bs. As. Izquierda Socialista/FIT Unidad

Esta semana se reunió la primera paritaria nacional docente y en diversas provincias gremios docentes y gobernadores. El jueves se juntará el Consejo Federal de Educación (CFE, con ministros de todas las provincias) y seguirán las negociaciones.

Según informó la conducción del gremio docente Ctera, en la paritaria planteó “la necesidad de que el salario docente no pierda con la inflación de 2022”. También que la infraestructura de las escuelas “sea la adecuada”, garantizar “vacunación, situación sanitaria y continuidad pedagógica” y continuar el debate del Convenio Colectivo. No hubo ningún tipo de acuerdo, pero aprobaron que se abran las negociaciones salariales en las provincias y sigan los debates con Nación.

Hay mucha preocupación en la docencia por la cuestión salarial. En 2021 se perdió, al menos, el 10% en relación a la inflación, en algunas provincias mucho más. ¡Y se reconoce que desde el 2016 la caída del poder adquisitivo del salario docente es cercana al 50%!

El salario inicial va desde 32.000 pesos y no llega a 50.000 pesos, según la provincia. O sea, el inicial está por debajo de la línea de pobreza y lejísimos de la canasta familiar. Cualquier porcentaje de aumento “corriendo detrás de la inflación” (como proponen los dirigentes Celestes de Ctera) sólo puede servir si, previamente, se aumenta un 50% el salario inicial, para recuperar lo perdido. Además, más del 50% del salario está en negro, con “bonificaciones” por fuera del Básico, lo que destruyó el escalafón por antigüedad, zona, títulos, etcétera (que son porcentajes sobre el básico), acható el salario de quienes se inician y quienes tienen 15 años de antigüedad, además de llevar a jubilaciones de pobreza.

Por eso hay que reclamar el blanqueo de las cifras en negro y un inicial igual a la canasta familiar, no porcentajes tramposos y en cuotas, con salarios de pobreza.

La cuestión sanitaria es otro debate clave. Como denunció Ademys, “el gobierno de Larreta directamente decretó el fin de la pandemia”, cuando en CABA hay más de 3 mil contagios diarios. “¡Ni burbujas, ni protocolos, aislamiento, ni medidores de dióxido de carbono ni barbijos!” El jueves lo “debatirá” el CFE, pero todos apuntan a iniciar las clases sin protocolos coherentes, ni vacunación masiva de docentes, estudiantes y auxiliares. Es una incógnita saber qué propondrán los gobernadores para que haya “continuidad pedagógica” con centenares de alumnos que se podrían contagiar diariamente, ya que no hay un “plan b”, ni burbujas, ni sistema mixto con clases virtuales para los contagiados, ni nada.

Más allá de la “expresión de deseos” de los dirigentes kirchneristas de Ctera, Alesso y Baradel, de que la infraestructura “sea adecuada”, la realidad es que en estos dos años se abandonó la inversión en obras y las escuelas no están en condiciones. Además, en vez de debatir un Convenio Colectivo, lo que deberían hacer es exigir el fin del trabajo precarizado que se instaló en el sistema educativo, que se respeten los derechos laborales del Estatuto y que se nombren los miles de docentes de los cargos faltantes para cortar la desocupación en el gremio y cubrir la falta de vacantes para alumnos en escuelas públicas.

Mientras Ctera avala el acuerdo de Fernández con el FMI (que sólo puede implicar mayor ajuste salarial y educativo) y deja librada a cada provincia en sus reclamos, es necesario que la docencia se prepare y organice para salir a pelear por salarios y todas las reivindicaciones, exigiendo a la conducción que rompa su acuerdo con el gobierno y llame a un verdadero plan de lucha nacional.