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Quieren proscribir a la izquierdaAfiliate a nuestro partidoFruto de la proscriptiva y antidemocrática Reforma Política aprobada por el gobierno de los Kirchner, la izquierda corre serio peligro de no poder presentarse en las próximas elecciones nacionales de 2011. Para derrotar esta nueva maniobra y presentar una alternativa obrera y socialista, es que lanzamos una campaña nacional de afiliaciones. La Ley de Reforma Política votada en el Congreso el año pasado no tiene el objetivo de alentar el debate ni la participación de la población en las decisiones más trascendentales de la vida política del país. Simplemente es una reforma electoral para ayudar a los Kirchner a ganar en octubre de 2011 y sobre todo, un nuevo intento de proscribir la participación electoral de la izquierda, y, por esa vía, a los miles de luchadores sindicales y estudiantiles que ya no confían en los partidos tradicionales. Por eso hay nuevos requisitos para poder presentarse. Al ya conocido 2% mínimo que se debe lograr en cada elección, ahora agregaron las internas obligatorias previas, en las que, de no superar en votos como mínimo el 1,5% del padrón, esto es unos 300.000, no se puede participar de las “verdaderas” elecciones para elegir candidatos. Es decir, un filtro proscriptivo que ataca directamente a las minorías, principalmente de izquierda, llevado adelante por un gobierno que se autodefine como “el más democrático de la historia” y que se llena la boca con campañas y slogans como “multiplicar las voces” y “ampliar las libertades de expresión”. Vuelven las colectoras y sigue la corrupción Hace unos días comenzaron a conocerse algunas de las nuevas maniobras que el gobierno prepara para la próxima reglamentación de las internas abiertas y obligatorias. Se supo que habilitarían nuevamente las listas colectoras en la provincia de Buenos Aires para que los K puedan juntar votos de todas las vertientes posibles, previo “seducir” con la caja a diversos candidatos a intendente y/o a gobernador. En Córdoba se acaba de aprobar una reglamentación de la ley provincial que autoriza adelantar las elecciones 180 días (ver Córdoba...), ejemplo que seguramente seguirán otras provincias, con lo cuál vamos a asistir a una nueva grilla de elecciones diferenciadas según le convenga a cada cacique. ¿Qué partidos pueden aguantar financieramente dos o hasta tres campañas electorales en un año? Sólo los grandes aparatos que se mantienen con el aporte de multinacionales y grandes empresarios. En el caso del PJ, la corrupción en sus manejos financieros se hizo pública una vez más con el caso de la mafia de los medicamentos y la efedrina, ya que todos los implicados en la causa fueron aportantes con más de 2 millones de pesos a la última campaña del Frente para la Victoria. Como se ve, los Kirchner no tienen autoridad para hablar de transparencia política. Derrotemos la trampa del gobierno Para que nuestro partido no pierda la legalidad nacional, culpa de esta antidemocrática y proscriptiva ley, los militantes de Izquierda Socialista hemos salido a las calles, plazas y universidades a pedir firmas. Es para recolectar las adhesiones y afiliaciones necesarias y así sortear las trabas políticas y legales que nos imponen el gobierno y el PJ, con la ayuda de la UCR. Ya son miles los que nos vienen apoyando en Capital, Provincia de Buenos Aires, Córdoba, Neuquén, San Juan, La Rioja y otras provincias. Debemos redoblar el esfuerzo, pidiendo a trabajadores, estudiantes y vecinos que se afilien a nuestro partido para poder participar en las próximas elecciones. La unidad de la izquierda es una necesidadEl hecho de que exista esta ley con la que el gobierno intenta proscribir a la izquierda, agrega una razón más a la necesidad imperiosa que tenemos desde la izquierda de alcanzar la unidad para las elecciones de 2011. Estamos ante la posibilidad de que, si no se da un frente electoral entre todas las organizaciones que nos reclamamos de la izquierda combativa, no logremos superar la traba del 1,5% que impusieron como piso para poder participar en octubre de las elecciones a cargos nacionales. Así se desprende de los resultados obtenidos por la izquierda en las elecciones de 2009. Solamente si nos unimos todos habrá posibilidades de alcanzar este porcentaje, por el caudal de votos que ya es patrimonio de la izquierda y por el efecto positivo que generaría en miles de trabajadores y estudiantes ver a la mayoría de las fuerzas de izquierda unidas. Por eso creemos que un gran Frente de Izquierda potenciaría mucho más lo que cada fuerza por sí sola puede lograr. Lamentablemente, el MST ya anticipó su decisión de incorporarse a Proyecto Sur. Política equivocada, ya que, amparándose en la popularidad de Pino Solanas, van a preparar una nueva frustración de centroizquierda, similar a lo que fue el Frente Grande. Por su parte, el Partido Obrero declaró recientemente que no se podría hacer un Frente ya que no hay condiciones para conformar un partido único de toda la izquierda. Este argumento es también equivocado, ya que para conformar un frente electoral, lo que hace falta, además de la voluntad de hacerlo, es un programa mínimo que de respuesta a los principales problemas que afectan hoy en día a los trabajadores y el pueblo. Se podría tomar como base el programa que viene siendo debatido y acordado en las jornadas del 24 de Marzo, 1o de Mayo o en la reciente movilización por el cuarto aniversario de la desaparición de Julio López firmado por decenas de agrupaciones políticas, sindicales y de derechos humanos. Las diferencias lógicas que pudieran aparecer alrededor de las candidaturas tampoco deberían ser un obstáculo, hasta se podría utilizar las propias internas obligatorias para destrabar esta cuestión. Además, es conocido por todos que, junto al PTS y el MAS, hemos sido parte de los únicos frentes de izquierda en dos oportunidades, tanto en 2007 como en 2009, sin necesidad de construir un partido único. El mismo PO desconoce que integramos juntos un Frente para las elecciones legislativas de la provincia de Córdoba en 2007. Como se ve, el argumento de PO no resiste el mínimo análisis. Por eso insistimos en que es necesario poner en pie un Frente de Izquierda para las próximas elecciones, para derrotar las trabas de la nueva legislación del gobierno y porque así lo reclaman los miles de luchadores obreros y estudiantiles que ya no creen en el peronismo ni en las falsas opciones burguesas. G.C. |
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Córdoba: No a la Reforma políticaDespués de las fraudulentas elecciones de Córdoba en el año 2007 que le permitieron al actual gobernador Schiaretti suceder a De la Sota, se anunció la reforma política en la provincia. Por tal motivo, durante 2008, se discutió un nuevo Código Electoral y se introdujeron reformas a la Ley de Partidos Políticos. La reforma política no fue tal, sino que solamente se redujo a una reforma electoral, donde se eliminó la sumatoria de votos, se acotó la intervención privada en el financiamiento de las campañas electorales, y se avanzó en la proscripción de los pequeños partidos políticos, sobre todo de la izquierda, imponiendo condiciones leoninas para su legalización. El gobierno nombró en aquella oportunidad una comisión de expertos que recibieron las propuestas de los distintos partidos y a pesar de la discusión de varios meses, que básicamente giró en torno a la sumatoria de votos y a la boleta única, un buen día el PJ cordobés (Unión Por Córdoba-UPC), apareció con un proyecto de su autoría con más de 200 artículos sin respetar nada de lo que se venía hablando, aprobándolo con el voto de su mayoría de “brazos enyesados”. En aquella oportunidad, nuestra propuesta fue de fondo, planteando la necesidad de reformar la Constitución para terminar con el fraude. Nada de esto se tuvo en cuenta. La semana pasada, por iniciativa de UPC, se votó en la Unicameral un conjunto de reformas a las leyes surgidas de aquella discusión, que en muchos aspectos borra con el codo lo que se escribió con la mano. A menos de un año de las elecciones, UPC se ha confeccionado un traje a medida, donde suspende todos los artículos referidos a los límites y control del financiamiento de campañas electorales, da una nueva vuelta de tuerca a la proscripción de los partidos de izquierda, e introduce el voto electrónico. Este último ha sido el tema obligado de todo el debate de la nueva reforma electoral, obrando como una pantalla que esconde el fondo de la cuestión. Esta reforma -que hemos rechazado en forma contundente-, crea un fuero electoral, compuesto de cuatro instancias, con jueces electos a dedo por el Tribunal Superior de Justicia. Para las próximas elecciones UPC “se hizo amigo del juez” -como dice el Martín Fierro-, da vía libre a los empresarios para que aporten para su campaña e implementará el voto electrónico, que hace dos años se discutió que se haría con programas propios desarrollados por las universidades de Córdoba y hoy está en la puerta de convertirse en un nuevo negocio para INDRA (la empresa multinacional proveedora de software) o alguna otra, convirtiéndose en un nuevo fraude “envuelto para regalo”. |
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