Escribe Adolfo Santos
La pandemia ha generado una verdadera calamidad humanitaria. Nos acercamos a los 3 millones de muertos, cerca de 120 millones de infectados y anuncian la aparición de nuevas cepas de Covid-19 más agresivas. No hay solución mágica para salir de esta crisis, necesitamos urgentemente de la liberación de las patentes para iniciar una vacunación masiva y combatir este flagelo.
Ante esa catástrofe, un puñado de multinacionales farmacéuticas y laboratorios están privando a millones del derecho esencial a curarse al imposibilitar, protegidos por la existencia de las patentes, la producción a gran escala de las vacunas. El capitalismo generó esta pandemia y es el mismo capitalismo imperialista el que impide la cura masiva merced a las patentes que aseguran a las empresas la exclusividad para producir y vender lo que es el resultado del conocimiento científico y técnico acumulado durante décadas por investigaciones en universidades, hospitales e institutos de todo el planeta y financiadas con presupuestos públicos. Se trata de la apropiación privada por parte de las multinacionales de descubrimientos e inventos que son patrimonio de la humanidad.
La pandemia, también, demostró el fracaso de la organización capitalista de la salud pública. Todos los países, aún los más desarrollados, se han visto desbordados después de haber recortado absurdamente los presupuestos de ese sector.
Es inadmisible que, en medio de una pandemia, sea el CEO de una multinacional farmacéutica el que determine cuánto se va a producir, a qué precio y a quién se le va a vender. Peor aún, que esas mismas empresas exijan a los gobiernos, incluido el de Argentina del Frente de Todos, la promulgación de leyes que le aseguren una política de confidencialidad de los contratos en cuanto a precios y pagos, el secreto de los procedimientos de fabricación, la extraterritorialidad jurídica y la inimputabilidad por efectos indeseados.
Fortalecer la campaña por el fin de las patentes
Desde Izquierda Socialista y el FIT-Unidad, nos oponemos a esas medidas que protegen a los grandes empresarios a costa de la salud de la humanidad, por eso votamos contra el proyecto de ley para proteger las multinacionales farmacéuticas presentado por el gobierno de Alberto Fernández. Ante una crisis humanitaria como la que ha generado la pandemia, defendemos la libre cooperación internacional en función de las necesidades sociales de los pueblos del mundo, sin patentes, que permita que la vacuna se produzca masivamente para llegar a todos y todas sin distinción.
La lucha contra las patentes tiene antecedentes. Nelson Mandela, desde el gobierno sudafricano, promulgó una ley en 1997 que suspendía las patentes para poder producir medicación anti SIDA. En el cambio de siglo, el ministro de Salud de Brasil, José Serra, desconoció las patentes que limitaban la producción de remedios contra el SIDA. En 2001 hizo lo mismo el acérrimo defensor de las patentes, Estados Unidos, acompañado por Canadá. Fue en ocasión de la llamada crisis del ántrax que ambos países suspendieron la patente de la Bayer alemana para poder producir ciprofloxacina el remedio necesario para combatir esa infección mortal.
Saludamos las distintas campañas que vienen impulsando diferentes organizaciones, como por ejemplo -y entre otras- Médicos Sin Fronteras, para que “no haya patentes médicas y que las vacunas, medicamentos y diagnósticos para el Covid-19 lleguen a todas las personas”. India y Sudáfrica, apoyadas por 99 países -con el rechazo de los países imperialistas- han reclamado ante la Organización Mundial de Comercio que se aplicara el inciso que permite la quiebra de patentes en caso de catástrofe humanitaria. Es tal la magnitud de la crisis humanitaria que se está instalando por causa de la vigencia de las patentes que el mismo secretario general de la Organización Mundial de la Salud Tedros Ghebreyesus se ha pronunciado en rueda de prensa en el mismo sentido hace pocos días.
Nos sumamos a esas voces y exigimos que los gobiernos dejen de ser cómplices de las multinacionales y exijan la inmediata exención de patentes, de métodos de diagnóstico, tratamientos y vacunas mientras dure la pandemia. Desde Izquierda Socialista hemos asumido la campaña internacional lanzada por la UIT-CI (Unidad Internacional de las y los Trabajadores-Cuarta Internacional) contra las patentes. En plazas, barrios y locales de trabajo hemos recogido miles de firmas que respaldan esta imprescindible petición. Además, junto al FIT-Unidad nos hemos posicionado en el mismo sentido mediante una extensa declaración pública.
El gobierno peronista de Alberto Fernández, en sintonía con los antecedentes históricos mencionados, debe suspender la vigencia de patentes e impulsar la producción nacional de vacunas e insumos, como lo expresa el proyecto de ley presentado por nuestro compañero Juan Carlos Giordano, diputado por Izquierda Socialista en el FIT-Unidad.
Continuamos recibiendo firmas que se suman a la campaña internacional por el fin de las patentes. Ya registramos adhesiones de 22 países. A continuación, reproducimos algunas de ellas de algunos de esos países.
Argentina
Carlos “Sueco” Lordkipanidse, Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, Eugenio Semino, defensor de la Tercera Edad, Viviana Reinoso, abogada, colectivo Juguete Rabioso. Mónica Méndez, Sec Org y Finanzas de la Cicop, Reynaldo Saccone, ex presidente Cicop, Cristian Luna, Sec Gral SITE, Tucumán, Oscar Atienza médico magíster en salud pública, Córdoba, Carlos Pecas Soriano, médico magíster en bioética, Córdoba, Mirta Pacin, médica pediatra, Neuquén, Ivan Sotomayor, enfermero, Autoconvocados de CABA, Raquel Osorio, docente Esc. de Enfermería de la UNaM, Juan Carlos Garberi, Dr. Ciencias Químicas, Biólogo Molecular, Hernán Camarero, historiador, docente e investigador Conicet., Pablo Bonavena, docente universitario UBA, Ricardo De Titto, historiador, Martín Mangiantini, historiador e investigador del Conicet, María Alicia Gutiérrez, profesora e investigadora UBA, Susana Laura Fernández, Magister en Educación, Adriana Migliavaca, profesora Universidad de Luján, José Castillo, economista y profesor UBA, Mercedes García Carrillo, bióloga, Malena Lenta, profesora e investigadora UBA, Silvia Schachter, Revista Herramienta, Rodolfo Sánchez, Físico e Investigador de Conicet, Luis Zamora, AyL, Marta Martínez, legisladora CABA AyL. Juan Carlos “Gringo” Giordano, dip nac (IS/FIT-U), Mónica Schlotthauer, dip nac electa (IS/ FIT-U), Pablo Almeyda, leg CABA (IS/ FIT-U), Mercedes De Mendieta, leg electa CABA (IS/FIT-U), Noelía Agüero, leg electa Córdoba (IS/FIT-U), Liliana Olivero, dip Córdoba (mc), Laura Marrone, leg (mc) CABA, Mercedes Trimarchi, leg (mc) provincia de Buenos Aires (IS/FIT-U), Mariana Scayola, Sec Gen Ademys, CABA, Jorge Adaro, Sec Adj Ademys, Montserrat “Tata” Gayone, CTA Bahía Blanca, Marcela Almeida, ATE-Indec, Rubén “Pollo” Sobrero, Sec Gral UF Haedo, Daniela Vergara, AMSAFE, Angélica Lagunas, minoría ATEN Capital, Daniela Pérez, ADOSAC- Pico Truncado, Adriana Astolfo, ADOSAC- Pico Truncado, Betiana Gaggioli,. ADOSAC - Puerto San Julián, Susana Llanos, ADOSAC – Piedrabuena, César Baudino AGMER Entre Ríos, Graciela Calderón, Sec. Adjunta SUTEBA La Matanza, Olga Ortigoza, SUTEBA Matanza, Juan Carlos Herrero, Direc Federación Agraria, Beatriz Di Benedetto, escenógrafa, vestuario cine, Silvina Balderra, enfermera licenciada, Isabel Barrueta Estudiante enfermería. Directora Jardín Maternal Hospital Narciso López Lanús, Emilse Apaza Licenciada Enfermería Hospital Fernández-CABA
Bolivia
Juan Carlos Cazón y Rossel Salazar Vázquez, dirigentes Central Obrera Regional de Tupiza, Potosí, María Dolores Póveda Licenciada Sec Nac de Conflictos de Licenciadas en Enfermeria, de FESIMRA, Cristina Albarracín Cañoto, licenciada Enfermería, SIMRA, Santa Cruz de la Sierra, Amado Quispe, dirigente del PT, ex dirigente de la Federación de Trabajadores de Salud Pública Chuquisaca, Eliseo Mamani, profesor rural, ex dirigente de la Federación del Magisterio Rural de La Paz
Brasil
Plinio de Arruda Sampaio, Editor Contrapoder, Babá, docente UFRJ - CST/PSOL, Chico Alencar, Vereador PSOL /RJ, Carlos Gianazzi, dip PSOL/SP, Celso Gianazzi Vereador SP, Monica Seixas -CoDeputada Estadual, Luana Alves y Erika Hilton - Vereadoras de São Paulo, Juliana da Ativoz - Ver de Osasco, Zé Maria – Presidente Nacional do PSTU, Vera Lucia PSTU, Ciro Garcia – Pres PSTU RJ, Cid Benjamin, vice-presidente da ABI, Sâmia Bomfim, Luiza Erundina, Taliria Petrone, Ivan Valente, David Miranda, Vivi Reis, Glauber Braga, Fernanda Melchiona, Marcelo Freixo, Aurea Carolina, Diputadas/os Fed PSOL, Robério Paulino, Vereador PSOL Natal, Flavio Serafini, Dep Est PSOL RJ, Tarcisio Motta, Vereador PSOL RJ, Paulo Eduardo Gomes, Vereador PSOL Niterói, Pedro Rosa y Bernarda Thailania Coord do SINTUFF, Val Ribeiro, Dir Nac FASUBRA, Adriano Días, Correios e CSP-CONLUTAS RJ, Diego Vitello, Sindicato Metroviários de SP y CSP-CONLUTAS, Osvaldo Coggiola, professor de História da USP, Paulo Galo Entregadores Antifascistas, João Santiago, Sintsep-pa, Gerson Lima, Sintsep-Pa, Benny Briolly, Vereadora PSOL Niterói RJ, Fernando Carneiro, vereador PSOL Belém, Vereadora Enfermeira Nazaré PSOL Belém, Gilberto Marques, Diretor Geral da Adufpa, Monica Francisco, Deputada Estadual do PSOL RJ, Jose Leonidio, Coordenador de Projetos Sociais da FIOCRUZ, Danilo Cabral, deputado federal e líder do PSB, Mathues Gomes, concejal Porto Alegre, Pedro Ruas, concejal Porto Alegre, Iza Lourenço, concejal BH/MG, Tallia Sobral, Vereadora em Juiz de Fora/MG, Duda Salabert, Vereadora e vice-presidente do PDT BH, Barbara Sinedino, Dirigente do SEPE, Bruno da Rosa, Oposição dos Garis/RJ, Henrique Carneiro, prof USP, Joao Ezequiel, Direc SIMPA,
Chile
Ranier Rios, dirigente MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores) de Chile, Anaiza Fabre, Candidata a Diputada Constituyente Distrito 9, Isadora - MST Chile, Cesar sepulveda, Candidato a Diputado Constituyente Distrito 9, MST Chile, Javier Ayarza “Permizo”, Candidata a Diputada Constituyente Distrito 10, Disidencias en Lucha - MST Chile, María del Carmen Moncada, Candidata a Concejal en Paine, MST Chile, Suyai Vilariño, Dirigenta Nacional de Isadora y MST Chile
Estado Español
Josep Lluis del Alcázar, dirigente Lucha Internacionalista (LI), Marga Olalla, delegada sindical de trabajadores municipales de Barcelona, LI, Miquel Blanch, delegado sindical de profesorado de escuelas de adultos, CCOO de Girona, Militante de LI, M. Esther del Alcázar, delegada sindical de enseñanza pública y dirigente de LI, Mariela Rodriguez, Raúl García Durán de Lara, Palafrugell, Miquel Cardil, Barcelona, Alicia Fernandez Gómez, Manuel Juan García Béjar, jubilado, CATARROJA, Celia Raquel Ceballos, Docente jubilada, Catarroja, Valencia, España, José María Murillo Roteta, Getxo/España
Estados Unidos
Socialist Core, JOHN REIMANN, United States, John Kirkland, Carpenters Local Union 167, Retired, Philadelphia, Nadezhda Hernandez, USA
México
Cooperativa LF del Centro; Centro de Investigación Internacional de Economía Social de la Universidad Iberoamericana, Cooperativa Labizet; Maak Raíz Artesanal; Junta Promotora de la Nueva Central de Trabajadores en Baja California., Del Frente Democrático de Delegaciones Democráticas de la Sección XI del SNTE: Pascual Vergara Padilla, secretario general de la D-III-9 de Educación preescolar, y Rodrigo Canek García Ramos, secretario general de la D-III-20 de Bibliotecas. Movimiento al Socialismo: Leda Silva Victoria y Enrique Gómez delgado, integrantes del Comité Ejecutivo. Jesús Torres Nuño, ex secretario general del Sindicato de Euzkadi, Epifanio García Carrillo, ex Secretario de Trabajo del Sindicato de Sandak, Gabriela Victoria Alvarado, Leonardo Federico Manchón Cohan, CDMX, Sergio Torres González, Débora Manchón Lerman, Javier Melo Melo, Esmeralda Martell Hernández, México
Panamá
Priscilla Vásquez, dirigente nacional de los trabajadores del Seguro Social de Panamá,Virgilio Arauz, dirigente de Propuesta Socialista, Omar Sanchez, Técnico en sistema, Zenaida Muñoz, Estadístico de salud, Daniel Argote, Profesor, Armando Antonio Madrid Zurita, Soldador, Alvin Madrid Zurita, Mercaderista, María Ortiz Vega, Administración de proveedores, José Ernesto Medina, Pedro Rivera Ramos, José Manuel Aguilar Hernández, Jorge Justavino, pintor
Perú
Enrique Fernández Chacón, Congresista, Partido de los Trabajadores UNÍOS, Edgar Vivar, Fed Nac Unif Trabajadores de la Salud Administrativos y Asistenciales (FENUTSAA Dignidad), María del Pilar Arevalo Geronimo, Sindicato Unitario Nacional de E Salud (SUNESS), Amaya Rodríguez Deysi, Sind de Trab. Técnicos Asistenciales y Auxiliares de la Salud del Hospital de San Juan de Lurigancho, Liliana Mayhuasca, Sindicato de Trabajadores Técnicos Asistenciales y Auxiliares de la Salud del Hospital de San Juan de Lurigancho, Cecilia Ojeda, José Luis Pajares, Sindicato Único de Mestros Contratados Provincia de Huamanga
Portugal
Gil García, Movimiento Alternativa Socialista (MAS), Adriano Zilhão, Economista e membro do Bloco de Esquerda, António Garcia Pereira - Advogado, André Traça - Médico internista e investigador em doenças infecciosas, António Paço - Historiador, Raquel Varela - Historiadora, Pedro Soares, Professor Universitário, dirigente do Bloco de Esquerda, Deputado XIII Legislatura 2015-2019, Mario Tomé Coronel Militar de Abril Ex-Deputado, Guadalupe Portelinha Professora Dinamizadora Cultural, Manuela Tavares - Investigadora en Estudios de Género, José Casimiro - Ativista Sind de Trab de Call Center, Red Unida Antifascista, António Grosso - Comissão Sindical Reformados do SBSI, João Pascoal - Coordenador da Comissão Nacional de Trabalhadores do Banco Santander Totta, Carla Santos - Horácio Figueiredo y Jorge Mendes miembros de la Comissão Nacional de Trabalhadores do Banco Santander Totta
República Dominicana
Movimiento Socialista de las y los Trabajadores de República Dominicana, Henry Morel, periodista, Máximo Federo, Santo Domingo
Turquía
Sindicato de los Trabajadores de Salud (SES), Ahmet Dursun Kahraman – Pres Cámara de ingenieros ambientales, Cevahir Efe Akçelik – Sec del comité de la coordinación provincial de Estambul, Enis Yiğitarslan – Pres Comisión de Médicos Residentes de la Asociación Médica de Izmir, Uraz Aydın – Editor revista de İmdat Freni, Oktay Çelik – Presidente del Partido de la Democracia Obrera, Görkem Duru – Editor del periodico de Gazete Nisan, Atakan Çiftçi – delegado del Sindicato de los trabajadores de educación y de ciencia, Suat Karlıkaya –Unión de Trab Alimentarios de Turquía (Tek Gıda-İş), Consejo Editorial de Terrabayt
Venezuela
José Marcano, Pres Sind del Ministerio de Tierras, José Bodas, Sec Gral Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela, Orlando Chirino, dirigente nacional de la C-Cura y del PSL. Manuel Isidro Molina, periodista, Miguel Ángel Hernández, profesor y dirigente PSL, Rolando Gaitán Deveras, profesor/PSL, Keymer Ávila, profesor UCV, Armando Guerra, Universidad Politécnica Cecilio Acosta, PSL, Daysi Ortega Castro, trabajadora social, Melanie Agrinzones, abogada, Héctor Berti Montiel, petrolero, C-cura, Antonio Espinoza, profesor PSL, Claudia Rodríguez Gilly, socióloga, PSL, Jairo Montaña, delegado Sintrasalud, Daisy D’Amario, profesora UCV, Pedro Latorre, Victor Andrés Jiménez Pugliese y Javier Antonio Jiménez Castro estudiantes Universidad de Carabobo, Josnid Gomez, gráfico, Ivette Jiménez Pugliese. estudiante Universidad de Carabobo, Oswaldo Pacheco, Economista, PSL Caracas
Ver petitorio y firmas completas nacionales e internacionales en
uit-ci.org / izquierda socialista.org.ar
Escribe Reynaldo Saccone
Cuando parece que las vacunas hubieran puesto el final de la pandemia al alcance de la mano, un nuevo obstáculo aparece, porque tanto la elaboración de la vacuna, como su fraccionamiento y distribución, lo hacen las multinacionales farmacéuticas que ponen el lucro empresario por delante de las necesidades de la población mundial.
Estas compañías que monopolizan las vacunas con las patentes también imponen en la producción la irracionalidad capitalista. En nuestro país estamos asistiendo a un ejemplo. La producción de la vacuna Oxford se hace en la planta de Garín, perteneciente al multimillonario peronista kirchnerista Hugo Sigman. “El 20 de enero exportó a México el equivalente a seis millones de vacunas. El 2 de febrero exportó otros seis millones de dosis. Ahora mismo produce a un ritmo de 18 millones de dosis cada mes y en abril alcanzará los 25 millones de dosis mensuales. Ese material permanece paralizado en los laboratorios mexicanos de Liomont y en la Argentina a la espera de que se resuelva el desabastecimiento de viales (envases)”. (El País, 25/2/2021).
La vacuna se hace en virtud de un negocio tripartito del mencionado Sigman, el multimillonario mexicano Carlos Slim y AstraZeneca, la multinacional que detenta la patente. Se fabrica en la Argentina, es exportada a México para ser fraccionada y empacada por el laboratorio Liomont y desde allí distribuida a toda América latina. El plan se vino abajo porque Liomont no puede cumplir su parte del acuerdo.
La solución capitalista a este problema continúa por el sendero de la irracionalidad. Como la vacuna de AstraZeneca no está autorizada aún en Estados Unidos (la luz verde se prevé para abril), la factoría estadounidense de la multinacional, sin problemas de desabastecimiento, se encargará de realizar por unas semanas la tarea de Liomont. “Ya hemos enviado el equivalente de 6.400.000 dosis desde Argentina a Estados Unidos y la semana próxima saldrán otras 6.400.000”, dijo Sigman (El País, 25/2/2021).
Tremenda irracionalidad de la producción capitalista: produjimos en nuestro suelo por lo menos 18 millones de dosis de vacuna y solo hemos vacunado a un millón y medio con una dosis. Por eso exigimos al gobierno que corte este camino de absurda irracionalidad obligando a la empresa AbsXience de Sigman, a ceder la fórmula de la vacuna, suspenda los envíos al exterior y disponga que el fraccionamiento y envasado se realice en instalaciones argentinas, en caso contrario se intervenga o estatice.
En nuestro país hay una importante industria farmacéutica con capacidad instalada, tecnología y recursos humanos que el gobierno debe volcar a la fabricación de vacunas y resolver en poco tiempo la inmunización de la población para acabar con la pandemia. Hay, también, una industria del vidrio centenaria, pero que cae en picada desde 2017. El sector de envases trabaja entre el 60% y el 80% de su capacidad. Es necesario reactivarla y ponerla a producir los frascos necesarios. Lo mismo con la fabricación de otros insumos. Astra-Slim-Sigman saben que su negocio ya está garantizado y que el Estado pagará, no les interesa apurar el pasado. El gobierno del Frente de Todos, entonces, debe intervenir para que esa producción a granel, acompasada a la ganancia empresarial, se transforme cuanto antes en millones de vacunas para el país y América Latina.
Centralizar y nacionalizar el sistema de salud y la industria farmacéutica permitirá lograr medicamentos gratuitos y una atención de excelencia, gratuita e igual para todos y todas.
Escribe Adolfo Santos
La desigualdad social en nuestro país y en el mundo es de una crueldad absurda. Más aún en el marco de la pandemia. Bajo la protección de los gobiernos, el capitalismo imperialista y las burguesías nacionales no dejan de amasar fortunas. Según un informe difundido en Davos durante la nueva edición del Foro Económico Mundial, los diez hombres más ricos del mundo, durante la pandemia, aumentaron sus fortunas en más de medio billón de dólares, 540.000 millones de dólares (Cronista 25/1/2021). Mientras tanto, la pobreza crece de forma exponencial en medio de despidos, suspensiones, retiro de derechos laborales, congelamientos salariales y se naturaliza la exigencia de trabajar sin respetar los protocolos para proteger la salud.
Para tener una idea de lo que representa esa ganancia obscena de los Jeff Bezos (Amazon), Elon Musk (Tesla Motors), Bill Gates (Microsoft) o del argentino Marcos Galperín (Mercado Libre), la Oxfam, una organización benéfica del Reino Unido, calculó que ese dinero sería suficiente para vacunar al mundo entero y revertir el aumento de la pobreza causada por la pandemia. La riqueza total de los multimillonarios alcanzó los 11,95 billones de dólares en diciembre de 2020, equivalente al gasto total de recuperación del coronavirus de todos los gobiernos que integran el G20, los países más ricos del mundo.
La propia Oxfam, que actúa en varios países, no tiene nada de socialista y busca resolver el problema de la pobreza en los marcos del capitalismo, acaba cuestionando este sistema perverso: “Un impuesto temporal sobre las ganancias excedentes de las treinta y dos corporaciones globales que más han ganado podría haber recaudado 104.000 millones de dólares en 2020. Esto sería suficiente para proporcionar beneficios de desempleo para todos los trabajadores y apoyo financiero para todos los niños y ancianos en países de ingresos bajos y medianos”. Sin embargo, ni esa simple medida es capaz de adoptar este sistema capitalista imperialista cuya esencia, con o sin pandemia, es la apropiación de las riquezas en pocas manos y la generación de ejércitos de pobres y desocupados.
Pero como decimos al inicio, esto no sería posible sin la complicidad de los gobiernos de turno que facilitan el camino de estos grandes empresarios. Sin embargo, está demostrado que cuando nos organizamos y luchamos, aun a pesar de las direcciones burocráticas traidoras, somos capaces de revertir la situación. Impedir la ampliación de la desigualdad social en medio de esta pandemia es una tarea fundamental y comienza por enfrentar los planes de ajuste de los gobiernos. Para eso necesitamos de la más amplia unidad y solidaridad con los que luchan, ese es el camino para arrancar medidas capaces de frenar la pobreza, achicar la brecha de la desigualdad y comenzar a construir una sociedad distinta, socialista.
Escribe Miguel Lamas
Gran parte de los medios de información hablan del “gran éxito” de Israel en la lucha anti-Covid, señalando que ya vacunó al 30% de su población, de nueve millones de habitantes, con la primera dosis de Pfizer, mientras que 8% ya recibió la segunda. Esto contrasta efectivamente con índices muy bajos de vacunación en Europa y los Estados Unidos, y casi nulos en los países semicoloniales. ¿Pero de qué es “ejemplo” Israel?
En primer lugar, y como sucede históricamente con el Estado racista de Israel, es ejemplo de discriminación. El plan de vacunación contra el Covid-19 abarca solo a los ciudadanos israelíes, incluidos los 600.000 colonos sionistas de Cisjordania, pero excluye a los casi cinco millones de palestinos que viven en Cisjordania y la Franja de Gaza bajo la ocupación militar israelí.
Además, Israel mantuvo todo el año 2020, y mantiene, en plena pandemia el bloqueo de la Franja de Gaza, lo que impide aún más el buen funcionamiento de su sistema de salud, sometido a medio siglo de ocupación y más de un decenio de bloqueo, ya que no puede atender las necesidades de su población. La pandemia de Covid-19 y la falta de acceso justo a las vacunas no han hecho más que agravar la discriminación y la desigualdad que sufre la población palestina.
Mientras el pequeño territorio de Gaza permanece bloqueado, Cisjordania está ocupada militar y económicamente en sus mejores tierras. Se apropiaron hasta del agua dulce para sus 600.000 colonos, que privan a los palestinos de medios de vida. Es decir, los territorios palestinos que abarcan solo una quinta parte de la Palestina histórica (el resto es del Estado de Israel) están bloqueados u ocupados y totalmente sometidos económicamente. La Autoridad Palestina es una formalidad sin recursos ni soberanía.
La pandemia se convirtió en otra herramienta del sionismo para destruir la sociedad palestina y seguir intentando expulsar a su población hacia otros países árabes.
Israel, campo de prueba de Pfizer y desastre social
El Estado de Israel, en medio de una crisis política, tendrá elecciones en marzo. Su gobernante, el primer ministro Benjamin Netanyahu, está siendo fuertemente cuestionado por corrupción. Intenta aparecer como “el salvador” de Israel contra el Covid-19.
El acuerdo con Pfizer, además del altísimo precio pactado de 38 dólares por cada dosis (en Europa es de 24 dólares), convierte a todo el país en un campo de pruebas porque el Estado de Israel se comprometió a entregar de inmediato a Pfizer todas las historias clínicas de los vacunados.
Lógicamente, a la empresa farmacéutica, además de vender millones de vacunas, le interesa tener en sus manos y usar en su beneficio económico la máxima información posible sobre los efectos secundarios y la inmunidad que vaya generando su vacuna. Las de Pfizer y Moderna son las primeras vacunas de ARN de la historia de la humanidad, una nueva tecnología aún no suficientemente probada, que recibieron luz verde por parte de las autoridades estadounidenses y europeas por la vía de la emergencia sanitaria. Así no hay datos claros sobre si puede prevenir la transmisión del virus y proteger a largo plazo.
Como sucede en casi todos los países del mundo, las consecuencias económicas de la pandemia en el sistema capitalista son durísimas y profundizan la desigualdad social entre los mismos ciudadanos israelíes. Mientras sectores económicos vinculados a las altas tecnologías no solo siguieron trabajando plenamente, sino que prosperaron en estos meses, otros se encuentran al borde del colapso. Las familias más pobres quedan al margen del sistema educativo por mala conexión a internet y por falta de computadoras. Hay centenares de miles de nuevos desocupados y también de ocupados que son obligados a aumentar su carga laboral sin aumento salarial.
Es decir, Israel, lejos de ser un “ejemplo” ante la pandemia, muestra y agudiza el carácter racista, genocida y profundamente explotador del Estado sionista.