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Tierra del Fuego: llevamos nuestro apoyo a los trabajadores en lucha


Escribe Mónica Schlotthauer, diputada nacional, por Izquierda Socialista/FIT Unidad

Entre los días 7 y 10 de noviembre estuve en Tierra del Fuego. El objetivo de mi viaje fue llevar apoyo y solidaridad a varios sectores de trabajadores que luchan por sus derechos, y respaldar a los compañeros del Frente de Izquierda Unidad en el final de la campaña.

Mi primera conclusión es que en nuestro país, de norte a sur, los problemas de los trabajadores y los sectores populares se repiten con la misma intensidad. La pobreza, el desempleo, los bajos salarios, la precarización laboral y las jubilaciones de miseria son una constante, con gobiernos que atienden prioritariamente los intereses de los grandes empresarios y el FMI.

El domingo 7, apenas arribada a Ushuaia y junto con mis compañeros de Izquierda Socialista, almorzamos en la planta Ambassador Fueguina con los trabajadores de esa fábrica y los dirigentes portuarios de la Lista Naranja, que luchan por la recuperación del sindicato, y Joana Reta del Programa de Educación Laboral (PEL), que reclaman por el pase a planta permanente. Ambassador está ocupada por sus trabajadores que llevan veintidós meses sin cobrar. Los compañeros denunciaron el rol traidor de la dirigencia de la UOM de Ushuaia, que públicamente tildó de ilegítima la ocupación, y agradecieron el apoyo brindado por Izquierda Socialista.

El lunes, después de una conferencia de prensa en Río Grande junto a los militantes del FIT Unidad que integran la lista de candidatos del PO, visitamos la Planta de Digital Fueguina ocupada por sus trabajadores (patronal del Grupo Garbarino, a cuyos trabajadores en conflicto también estamos acompañando en Buenos Aires). El relato de uno de los operarios fue conmovedor: “hace ocho meses que no cobramos y, a pesar de las gestiones ante el Ministerio de Trabajo y la audiencia con el gobernador, continuamos sin respuestas”.

El martes 9 realizamos otra conferencia de prensa en Ushuaia, y por la tarde nos reunimos con dirigentes del Sindicato Municipal Suoem, con la participación de trabajadores de Ambassador. Se debatió sobre la situación de la provincia, las luchas en curso de Ambassador, Digital Fueguina, Brightstar del Grupo Mirgor de Caputo, y la flexibilización laboral impulsada desde el oligopolio Newsan que chantajea con rebajar las condiciones de trabajo, salario y derechos si quieren seguir trabajando. Otro escarnio es la precarización impuesta por el programa de gobierno PEL, donde los y las trabajadoras cobran 4.000 pesos por cuatro horas de trabajo en una provincia cuya canasta básica supera los 160 mil pesos. Discutimos el saqueo de los recursos naturales por parte de las multinacionales, principalmente de la pesca y el petróleo, y la necesidad de estatizar el puerto. También sobre la crisis de la salud pública y de la lucha por recuperar OSEF, la Obra Social de los estatales que actualmente se encuentra intervenida por el gobierno, en estado crítico por el uso de los recursos para otros fines.

El último día nos reunimos con el Secretario General del Sindicato de Oficiales y Capitanes Navales, quienes reclaman la instalación de una escuela de capacitación para marinos  en todas las especialidades. Una reivindicación correcta, porque como no hay mano de obra capacitada, se cubren las vacantes con mano de obra extranjera. Mientras tanto, miles de desocupados reclaman poder trabajar.

Un cúmulo de problemas, en una provincia con una promoción industrial que beneficia a las patronales con el recorte de impuestos y regalías, que se van cuando quieren dejando una altísima desocupación y una gran crisis social como demuestran el 40% de pobreza y 54% de desocupados. Sin embargo, regresé llena de optimismo. Por un lado, por la incansable lucha de los trabajadores de esa región, que demuestra que la movilización es la mejor herramienta para defender sus derechos, por otro, por las posibilidades que se le abren al Frente de Izquierda y en especial a nuestro partido para construirse alrededor de esas luchas.

La Isla Grande desmiente la propaganda de los partidos patronales de que tenemos que traer capitales de afuera y flexibilizar las leyes laborales para crear más puestos de trabajo. Tierra del Fuego es un emblema de esas políticas. Sin embargo, nos encontramos con los mismos problemas de todo el país. No hay salida con estos gobiernos patronales. Tenemos que apostar con todo a la lucha y a una alternativa de los trabajadores y el pueblo pobre para salir de esta crisis. Esa es la propuesta del FIT Unidad, y por eso se consolida como la tercera fuerza nacional.