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Ante la crisis del peronismo, la salida es el Frente de Izquierda Unidad


Escribe Mercedes Trimarchi, candidata a legisladora porteña por Izquierda Socialista/FIT Unidad

Los resultados electorales, abrieron un importante debate en el gobierno del Frente de Todos: ¿el problema es Alberto Fernández? ¿La salida es que haya “más kirchnerismo”? O, a la inversa, ¿el problema es el kirchnerismo? Nuestra respuesta es contundente: el peronismo no es salida para el pueblo trabajador.

Se trata de una discusión importante que fraternalmente queremos  llevar adelante con miles de compañeras y compañeros que hasta no hace mucho tenían expectativas en el gobierno del Frente de Todos. Hace dos años lo votaron para “terminar con el ajuste de Macri” y ahora, con bronca y frustración lo castigaron en las PASO. Lo hicieron de distintas maneras: no yendo a votar, votando al Frente de Izquierda, o algunos incluso, equivocadamente, dándole su voto a opciones patronales como Juntos por el Cambio, Milei o Espert.

Nuestra opinión es que el problema no es exclusivamente Alberto Fernández, o sus ministros “que no funcionan” (por tomar la expresión de la vicepresidenta Cristina). El responsable, y la debacle, es el peronismo de conjunto. Acá perdió Alberto Fernández, pero también el kirchnerismo (Cristina, Máximo, Kicillof). Retrocedieron en millones de votos en lo que consideraban su propio bastión, el conurbano bonaerense. Tampoco se salvó la tercera pata del Frente de Todos, Sergio Massa; perdió estrepitosamente en Tigre, y lo mismo le pasó al gobernador de su espacio, Mariano Arcioni, el “campeón” de la megaminería en Chubut. También salieron derrotados la mayoría de los gobernadores, desde Alicia Kirchner en Santa Cruz, hasta aquellos que buscaron colocarse más “alejados” del gobierno nacional, como Schiaretti en Córdoba o Perotti en Santa Fe. Hasta Florencio Randazzo, que intentó armar una opción peronista “por fuera” en la provincia de Buenos Aires, hizo una muy mala elección, quedando por debajo del Frente de Izquierda Unidad y de Espert.

Es que, más allá de las internas, del forcejeo por ministerios o secretarías, o incluso de las peleas por el armado de las listas, todo el peronismo acordó en lo que fue el eje principal del gobierno del Frente de Todos: priorizar el acuerdo con los pulpos acreedores de la deuda externa y el FMI. En plena pandemia, ya llevarán pagados hasta fin de año casi 12.000 millones de dólares, más que todo el dinero que se puso para atender la emergencia sanitaria y social. El peronismo de conjunto está apoyando las negociaciones con el Fondo y votará el acuerdo que se haga, que, sin ninguna duda, traerá más ajuste, miseria y saqueo de nuestras riquezas. Fue la propia Cristina la que dijo, en el lanzamiento de campaña, que el dinero que el FMI había enviado supuestamente para atender la pandemia se utilice para pagar los vencimientos al propio Fondo. Todo el peronismo está alineado en promover la megaminería contaminante, el acuerdo porcino y el saqueo del gas y el petróleo al estilo Vaca Muerta. Alberto Fernández defiende a Martín Guzmán, su gran “negociador” con el FMI; Cristina dice una y mil veces que es “pagadora serial” y que nunca dejará de abonar las deudas (como por otra parte sucedió durante los doce años de kirchnerismo, que asumió con 190.000 millones de deuda externa, pagó en efectivo 200.000 y terminó con una deuda mayor de 240.000 millones); Sergio Massa se ofrece como “mediador” con sus amigos del establishment norteamericano. ¡Todo esto está infinitamente lejos, en las antípodas de las históricas “tres banderas” del peronismo! Así seguro que no habrá nunca ni justicia social, ni independencia económica ni soberanía política.

Por eso el peronismo no va más. No van más los gobernadores, que ajustan en sus provincias, mientras las regalan a las multinacionales para el saqueo de las riquezas agrícolas, mineras o petroleras. No van más los intendentes del conurbano, donde en muchos lugares el PJ viene gobernando ininterrumpidamente desde 1983 y los barrios siguen sumidos en la miseria, sin salud, transporte, cloacas ni los servicios más elementales. No van más los burócratas sindicales peronistas cómplices del ajuste contra los trabajadores. El peronismo nos gobernó la mayor parte de los últimos 38 años. Siempre pagando deuda externa, implementado ajustes, y en definitiva, aumentando la pobreza y el saqueo. Pasó con Menem, con Duhalde, con Néstor y Cristina Kirchner y ahora con Alberto Fernández. Es hora de animarse a dar el salto y apoyar a los que hoy defienden los reclamos obreros y populares, los únicos que decimos que hay que priorizar al pueblo trabajador y no al FMI: el Frente de Izquierda Unidad. Los que peleamos de verdad por una Segunda Independencia, rompiendo los lazos políticos y económicos que nos atan al Fondo y a los buitres acreedores y los que de verdad postulamos un programa alternativo, obrero y popular, para que haya trabajo, salarios y jubilaciones dignas, viviendas populares, salud y educación pública de calidad y para todas y todos.