Fue una larguísima lucha, donde el pueblo enfrentó a todos. Recordemos que la instalación de la planta había sido negociada por la entonces presidente Cristina Fernández de Kirchner en junio de 2012, con el apoyo del gobernador De la Sota y del propio intendente radical de Malvinas Argentinas, Daniel Arzani. Los vecinos se organizaron en la Asamblea de Lucha por la Vida, en la que participaron distintas organizaciones políticas, sociales y ambientales. Desde ahí se organizaron diversas marchas y hasta un bloqueo en la puerta de la empresa. Después de una durísima pelea, hoy podemos decir que con la movilización y la organización terminó triunfando el ¡Chau Monsanto! Los vecinos festejaron, con todo derecho. Se trata de una victoria de la que se podrán sacar muchas enseñanzas para futuras peleas.