Escribe Reynaldo Saccone, ex presidente de Cicop
El canciller Felipe Solá expresó en su cuenta de Twitter: “Pedimos oficialmente que nos envíen vacunas que están stockeadas en su país”. El tuit, que fue compartido por el propio Alberto Fernández, fue emitido al final de la reunión que Solá mantuvo con Juan González, principal asesor de Joe Biden para el Hemisferio Occidental (Perfil, 13/4/2021). La reserva estadounidense de la vacuna elaborada por AstraZeneca asciende a más de 20 millones de dosis, según personas familiarizadas con el tema (Perfil, 8/4/2021). Espera la autorización de la FDA (la ANMAT norteamericana) para ser utilizada en la campaña de vacunación nacional del presidente Joe Biden. El gobierno peronista, en lugar de ponerse a fabricar la vacuna a gran escala en nuestro país, prefiere pedir a los Estados Unidos lo que, en realidad, se puede hacer aquí.
La respuesta del país del Norte no se hizo esperar. Nos enteramos hace unos días por el propio Boletín Oficial. La Argentina le comprará a los Estados Unidos diez aviones Beechcraft Hurón con destino a la Fuerza Aérea (La Nación, 19/4/2021) por un monto superior a los 16 millones de dólares. El gobierno de Alberto Fernández se apresuró a concretar la adquisición apenas unos días después de la visita del enviado del presidente norteamericano. De las vacunas, ni una palabra. Esa plata, que equivale a cuatro millones de dosis de la vacuna AstraZeneca, podría haber sido aplicada también a aliviar los múltiples problemas que pesan sobre el agotado sistema de salud. Evidentemente, las prioridades del gobierno no apuntan a satisfacer las necesidades populares.
Escribe Reynaldo Saccone, ex presidente de Cicop
La ministra de Salud, Carla Vizzotti declaró a los medios que “el lugar en el que se están generando contagios es en el ámbito social” y “no en fábricas o en aulas… donde las actividades se rigen con protocolos… Es en los momentos de descanso, cuando bajan los cuidados” (El Economista, 01/04/2021). El ministro de Transporte, Mario Meoni, ante el tremendo hacinamiento en los trenes y colectivos dio como gran solución fijar las ventanillas para que queden abiertas y sin inmutarse agregó: “Eso es bastante sencillo, lo estamos empezando a hacer” (El Intransigente, 14/4/2021). Completando el cuadro, Carolina Castro, ejecutiva de la centenaria entidad patronal Unión Industrial Argentina (UIA) declaró a CNN Radio el 6/4/2021: “Tenemos protocolos en todas las industrias y hemos verificado que dentro de las fábricas no está habiendo contagios…Los protocolos funcionan”.
La realidad es bien diferente. En las empresas hay contagios y, además, los protocolos no se cumplen. Trabajadores contratados de seguridad del ferrocarril Roca denuncian que no cuentan con baño para lavarse las manos, ni con servicio médico; reciben un barbijo cada seis meses y no pueden usar los propios. En Toyota y Volkswagen se han registrado decenas de infectados en las últimas semanas. Por otra parte, no cede la saturación de los medios de transporte. Como dice un compañero ferroviario “cada vagón del Sarmiento en hora pico equivale a una fiesta clandestina”. Con solo multiplicar el número de vagones por formación por el número de trenes de todas las líneas se podrá tener una idea del disparate que significa culpar a las reuniones sociales de la circulación explosiva del virus.
Importante intercambio del diputado Juan Carlos Giordano y Liliana Olivero, diputada provincial (m.c.) de Córdoba con Carolina Heidenhain y Josefina Martorell (directoras de Comunicación y general, respectivamente, de Médicos sin Fronteras) en pos de fortalecer la campaña por liberar las patentes de las vacunas Covid-19.
Escribe Adolfo Santos
El miércoles 14 de abril, la Organización Mundial de Comercio (OMC) se reunió para tratar el pedido para liberar las patentes de la vacuna Covid-19. Como era previsible, la petición, presentada por Sudáfrica e India y más 99 países con el apoyo de 379 organizaciones internacionales, fue rechazada. Un claro posicionamiento de la OMC en defensa de los intereses económicos de la industria farmacéutica en desmedro de la vida de millones de personas en el mundo.
Ese mismo día, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se llevó a cabo un acto del FIT-Unidad. También hubo convocatorias en varios países de la mano de la Unidad Internacional de las Trabajadoras y Trabajadores (UIT-CI) junto a otras organizaciones de Salud.
El diputado nacional Juan Carlos Giordano (Izquierda Socialista/FIT-Unidad), orador central de la convocatoria junto a Nicolás del Caño (PTS), Gabriel Solano (PO) y Vilma Ripoll (MST), enfatizó: “Hoy fue una jornada mundial. Se hicieron actos, repudios, videos en las redes y distintas actividades en Argentina, Chile, Bolivia, Brasil, Panamá, Perú, Venezuela, México y el resto del mundo como en Turquía, entre otros países. Las consignas fueron claras: que se liberen las patentes para que se permita una producción masiva de vacunas para inmunizar a la población mundial de manera inmediata”.
El bloque del Frente de Izquierda-Unidad, Pablo Almeida (Izquierda Socialista) y Alejandrina Barri (PTS), presentó un proyecto en la legislatura porteña para poner la capacidad productiva de la Ciudad para el combate de la pandemia.
"Proponemos utilizar la capacidad productiva de la Ciudad junto con las millones de dosis de la vacuna Astra-Zeneca que se producen en Garín que deberían quedar en el país." Afirma el proyecto.