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Juan Rivera

Ledesma cómplice del golpe

¡Cárcel común para los Blaquier!

El procesamiento judicial de Blaquier sienta un importante precedente en la pelea por el juicio y castigo a todos los responsables de la dictadura. En este caso, para los empresarios en tanto cómplices civiles. La causa evidencia la colaboración de los grandes grupos económicos con el golpe del ‘76.

Pedro Blaquier, dueño del Ingenio Ledesma, y su gerente administrativo, Alberto Lemos, fueron procesados como cómplices en primer grado de la privación ilegal de la libertad agravada de 29 personas. Tres de ellas fueron secuestradas el 24 de marzo de 1976, entre quienes se encontraba el desaparecido Luis Arédez, asesor del Sindicato de la Industria del Azúcar del Ingenio Ledesma y ex intendente de General San Martín, quien durante su mandato intentó aplicarle un impuesto a la empresa similar al ABL. Los otros 26 fueron detenidos en aquella oscura jornada conocida como la Noche del Apagón (hecho relatado en la película Sol de Noche), en julio de ese mismo año. Como se señala en la causa, ese operativo no podría haberse realizado sin la colaboración de Blaquier, quien prestó sus automóviles para el traslado de los secuestrados. A cambio, se quitaba de encima a importantes referentes de un sindicato que se había convertido entonces en una referencia del clasismo en todo el país junto con la UOM de Villa Constitución, como siempre nos contaba el “pelado” Matosas, nuestro querido compañero fallecido en 2006.

La causa sienta un importante precedente, en tanto se juzga la responsabilidad civil durante la dictadura, evidenciando la complicidad de grandes empresarios en la desaparición de importantes dirigentes obreros y sus intereses comunes para con la política económica del régimen militar. En ella se destaca “la colaboración activa de los mayores grupos económicos” con los militares. Aún cuando se trate de un solo empresario, se trata de un fallo histórico, ya que -de avanzar- sentaría un importante antecedente en la pelea por castigo al conjunto de los responsables del golpe, militares y civiles.

Los Kirchner y una pelea que no es tal

El kirchnerismo ha presentado el fallo como un trofeo de su política de Derechos Humanos. Sin embargo, más bien parece el fruto de la pelea que han dado a lo largo de todos estos años sus familiares y distintos organismos. La mujer de Arédez, fallecida en 2006, Olga Márquez, se ha convertido en un monumento de la pelea contra la impunidad por su lucha inclaudicable. Además, basta ver la relación del kirchnerismo con el empresario. A lo largo de todos estos años, Blaquier no sólo ha gozado del principio de inocencia, sino que, convertido en un defensor del “modelo”, ha seguido amasando una fortuna incalculable. El año pasado, incluso, el gobierno provincial del kirchnerista gobernador jujeño Barrionuevo ordenó un violento desalojo de familias originarias para defender 15 de las 130.000 hectáreas que poseen los Blaquier. Pero no sólo eso, sino que el gobierno nacional jamás ha avanzado sobre los grandes grupos económicos que apuntalaron el golpe, mucho de los cuales hoy son sus principales aliados, entre ellos el grupo Ledesma. Recientemente se conoció, por ejemplo, el caso de Osvaldo Cornide (titular de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa), ayer defensor de la dictadura y hoy kirchnerista entusiasta y habitué de los palcos en actos oficiales.

Tal como señalaron los familiares de Arédez, el procesamiento es un paso importante pero aún no es un triunfo total. Blaquier y Lemos todavía no se encuentran en la cárcel. Es necesario avanzar en la condena a cárcel común y efectiva, expropiando el conjunto de sus bienes. Esto permitiría avanzar sobre el resto de los grandes grupos económicos que aún hoy operan en el país y que han sido una de las principales patas del golpe, prestando servicios en la desaparición de dirigentes obreros como los del Ingenio Ledesma.


El poder del Grupo Ledesma

La presidenta junto al cómplice de la dictadura

La presidenta junto al cómplice de la dictadura

Es el grupo económico más importante del país. Controlado por la familia Blaquier -burguesía argentina que algunos llaman “oligarquía”-, sus dueños han sido parte de las comitivas presidenciales para hacer negocios por el exterior de la mano del gobierno kirchnerista.

Ledesma es un complejo agroindustrial que produce azúcar, jarabes, alcohol, fructosa, papel, cuadernos y repuestos, carnes, granos, frutas, jugos concentrados y aceites esenciales.

Ledesma fue el gran favorecido por el reparto de la cuota interna anual de bioetanol. Así, los Blaquier -junto a Tabacal y La Florida- concentran alrededor del 60 % de este mercado. El sector también experimentó la transformación que se inició en el mundo rural a partir de los años noventa. En esos años la multinacional Seabord Corp, de Estados Unidos, se quedó en Salta con El Tabacal -de la familia Patrón Costas-, y el ingenio San Isidro pasó a manos de Prosal S.A. Esa mutación explica que hoy el 30% de la producción de azúcar esté en manos de inversores extranjeros y hace que el gobierno nacional considere a Ledesma Sociedad Anónima Agrícola Industrial (L.S.A.A.I.) como uno de los grupos económicos que mejor sintoniza con su estrategia oficial.

El Grupo Ledesma posee:

-Ingenio o Complejo Agroindustrial Ledesma en Libertador General San Martín (Jujuy) con 35.000 hectáreas de caña de azúcar. Fábricas de azúcar, alcohol, celulosa y papel. 2.000 hectáreas con cítricos, paltas y mangos, una empacadora de frutas y una planta de jugos concentrados. Generación propia de electricidad de 51.000 kW. 1.400 km de canales de riego y 600 km de carreteras construidas y mantenidas por la empresa.

-Planta Glucovil en Villa Mercedes (San Luis) con planta de molienda húmeda de maíz. Para producción de jarabe de fructosa, glucosa, almidones y otros subproductos del maíz, con generación propia de electricidad (7.500 kW).

-Fábrica de Cuadernos y Repuestos en Villa Mercedes (San Luis).

-Establecimientos Agropecuarios en Buenos Aires y Entre Ríos para producción de carne y granos. En La Biznaga, La Bellaca, Magdala y Centella (52.000 hectáreas).

-Finca Santa María de Concordia (Entre Ríos), con 250 hectáreas de plantaciones de cítricos.

-4% en la Empresa Aguaragüe, que explora y explota petróleo y gas en el área del mismo nombre de la Provincia de Salta (donde tiene como socios a Tecpetrol, Repsol -YPF, Petrobras Argentina, Mobil Argentina y Compañía General de Combustibles).


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